Osaaamaaa!!!

Nadie les avisó. Nadie les advirtió de lo que podía pasar. Osama les engañó, y todos comienzan, uno a uno, a perder la fe en el Corán.

Nadie les ha dado lo que les habían prometido. Les prometieron morir y reunirse con las hermosas y jóvenes mujeres que por derecho divino les correspondían. Mintieron. Les prometieron quedar en la última posición de la tabla y ahora mismo están justo en el lado contrario. Mintieron.

La venganza y la furia son las únicas palabras. La masturbación ya no es una opción.

El Escuadrón Suicida Picao del Khalapeñari se ha propuesto las dos máximas fundamentales de su filosofía de juego para el próximo partido: perder y morir. Siendo justos, merecen ambas cosas.

En cualquier caso, al menos hoy puedo decir algo que jamás pensé que podría decir en ningún momento de mi vida: Soy el puto líder.